Pedro Septién Orozco, "El Mago", corresponde a una generación de comentaristas deportivos cultos, respetuosos y autodidactas: don Agustín González "Escopeta", Fernando Marcos, Antonio Andere Dáher, Oscar "el Rápido" Esquivel, Manuel Seyde, Francisco Rubiales, conocido como Paco Malgesto, Alonso Sordo Noriega, Pepe Alameda, Alejandro Aguilar Reyes "Fray Nano", Ángel Fernández, Dr. Manuel Loyo de Valdés, El "Conde" Gustavo Armando Calderón, Ángel Morales "Moralitos", Jorge "Sonny" Alarcón, Antonio Moreno "Morenito", Fernando Luengas, Carlos Trápaga Barrientos, Cutberto Fernández, "El Conejo" Figaredo, y Tomás "Tommy" Morales, contemporáneo de todos ellos.
Con su partida finaliza una época de maravilloso ingenio; con su adiós hizo más grande el abismo entre el periodismo con sustancia y lo vacuo del actual.
Ya cuando se tuvo las transmisiones directas desde los estadios americanos, el "Mago" tuvo su primera Serie Mundial desde Nueva York en 1953 al lado del Buck Canel, el narrador famoso en América Latina de los juegos de la Gran Carpa en español.
Narró peleas de boxeo memorables de Joe Louis y Ray Robinson, aunque también se negó a estar en el combate del ídolo Raúl "Ratón" Macías.
[8] Existe otra versión en relación con el apodo del Mago: en su juventud fue crupier de un casino en donde gracias a sus dedos muy largos, hacía diversos trucos con las monedas y con los naipes.
En marzo de 2013, cuando se le realizaba una entrevista, se le preguntó sobre el Béisbol en México y como vería su futuro, a lo que Pedro Septién respondió de forma nostálgica: