Pedro Leopoldo Carrera

Sin embargo, su pasión por el "paño verde y las bolas de marfil" lo llevaría una tarde, con tan solo 15 años, a ingresar a un viejo café que oficiaba como sala de billar, como tantos en aquella época.

Jamás olvidaría ese encuentro, ni tampoco a aquel casual adversario que se convirtió en su amigo de toda la vida.

Y tal como sucediera en su ciudad natal, en la capital de Buenos Aires tampoco tuvo rivales.

Con su impecable juego, logró una fervorosa lista de seguidores y fanáticos entre los que se encontraba Juan Duarte, hermano de Eva Perón -esposa del Presidente argentino Juan Domingo Perón-, quién lo apoyó para conseguirle los auspicios para casi todas sus giras por Europa.

Pedro Leopoldo Carrera fue un hombre bondadoso y generoso, de bajo perfil, que ganó mucho dinero.

Lo hizo con tanta rapidez como lo gastó, sin hacer reservas para cuando empezó a padecer los efectos de una vida disipada.

Llegó a jugar algunos torneos argentinos durante 1961 y 1962, pero ya no sería el Carrera de antaño.

Pedro L. Carrera en 1939.
Pedro Leopoldo Carrera (Campeón mundial) en 1952.