Pavel Oyarzún

Pavel tuvo una temprana vocación literaria, y todo lo que hizo ha sido considerado por él como un pretexto, siempre con la mentalidad de ser escritor.

Además ha participado en diversos encuentros literarios tanto a nivel nacional chileno como internacional.

Como profesor primario ejerció pocos años, "lo justo" según él, para poder tener una clara idea del trabajo de los maestros en las Escuelas Municipales, una experiencia que mantiene viva y con gratitud.

Enfocándose en la poesía publica su primer libro La Cacería (1989) y un par de años más tarde, el segundo al que llamó La Jauría Desquiciada (1993).

La lista de publicaciones en el género continuaría hasta comienzos de la década siguiente, cuando deja atrás la poesía para abrirse paso a la narrativa, porque quería decir cosas que el lenguaje poético no le permitía.