Años después viajó también a Londres, los Balcanes, Atenas, Estambul y Bucarest.
En estos años, junto con Peter Surava, llevó a cabo una serie de reportajes socialmente comprometidos.
Tras la guerra, se trasladó a Estados Unidos, donde fotografió diferentes colonias suizas.
Asimismo, se encargó de documentar la reconstrucción alemana, país en el que permaneció durante un tiempo en Munich.
Con el tiempo llegó a colaborar en más de 15 revistas, entre suizas y extranjeras.