Nació en Fourchambault en Francia Central, y estudió medicina y llegó a profesor en la Escuela de París de Medicina, especializándose en enfermedades contagiosas en niños.
Durante la Primera Guerra Mundial llevó a cabo un trabajo importante sobre la malaria, lo que le valió que le nombraran Comendador de la Legión de Honor francesa.
Fue después de su jubilación cuando sucedieron los acontecimientos que le hicieron más conocido.
La medalla muestra a Armand-Delille en una cara, y un conejo muerto en la otra.
No es raro que los cazadores disparen a conejos infectados, viendo esto más como un acto de piedad.