En todo caso será una zona sin techo, opcionalmente cubierta con porches, galerías interiores con columnas, vigas o arcadas para soportar la estructura del cobertizo.
Estos patios pueden coincidir con otros análogos de edificios vecinos e incluso quedar con un lado abierto a la calle para obtener mayor iluminación.
El suelo de los patios puede estar pavimentado, o poseer una zona ajardinada.
Hoy día encontramos en Almagro (Ciudad Real) uno de los más representativos del siglo XVII y el único completamente conservado.
[4] Como espacio de luz y color, el patio fue un motivo pictórico muy común entre los pintores mediterráneos del siglo XIX.