Pataria

Generalmente se considera que el movimiento, asociado con los disturbios urbanos en la ciudad de Milán, comenzó entre 1056 - 1057 y terminó en 1075.Entre 1056 y 1057, inflamados por la predicación del diácono Arialdo y de otros canónigos de la catedral, los sectores más puritanos del pueblo milanés, pertenecientes a todos los estamentos sociales, comenzaron a boicotear los actos religiosos celebrados por curas casados o que vivían con concubinas, al tiempo que denunciaban las prácticas simoníacas.Tras apelar ambas partes al juicio del papa Esteban IX, se decidió la celebración de un sínodo en Novara, donde fueron excomulgados los dirigentes patarinos por no acudir (1057).La situación degeneró en una auténtica guerra civil entre antipatarinos y patarinos, ayudados por los reformadores que dominaban entonces el papado y que acudieron como legados pontificios a Milán: Anselmo di Baggio (futuro papa Alejandro II), Pedro Damián (cardenal obispo de Ostia) e Hildebrando de Toscana (futuro Gregorio VII).El papa reformador por excelencia, Gregorio VII, no pudo evitar que el arzobispo nombrado por el emperador, Tedaldo, dominara Milán y acabara con la pataria, aunque lo excomulgó varias veces.
El asesinato del diácono Arialdo , líder de la pataria .