[3] Los médicos, por tanto, no recomiendan pasear, sino formas de ejercicio más intensas y aeróbicas.
Pasear fomenta la creatividadː en unos experimentos con estudiantes, cuando caminaban se les ocurrían 6 veces más usos posibles para objetos cotidianos (un botón, un neumático) que cuando estaban sentados.
Se considera una tradición saludable para "bajar la cena"[8] (digerirla mejor y tener un sueño más profundo).
La similar y extendida costumbre italiana de un paseo al anochecer se denomina la passeggiata.
[14][15] El crítico literario ruso del siglo XIX Vissarion Belinsky describió San Petersburgo como el centro de paseo urbano en el país, por contraste con Moscú.
Chaikovski compuso un acompañamiento musical al poema de Nikolay Grekov “No tenemos mucho tiempo para pasear”.
El surgimiento de pasear como actividad difundida surge del vagar aristocrático por los jardines y parques barrocos.
La construcción en las ciudades de parques o calles destinados a pasear está muy relacionada con la actividad.