[6] Ideológicamente, los socialistas son un partido de centroizquierda socialdemócrata, progresista y europeísta.
Al mismo tiempo que pone en valor el papel del mercado y la libre iniciativa, el PS sostiene que la economía debe estar sujeta a una «regulación institucional adecuada» para corregir fallas y desigualdades, y asegurar una justa redistribución de la riqueza.
Con la misma convicción con la que defiende una economía de mercado, el PS rechaza una «sociedad de mercado», a la que define como una hegemonizacion ilegítima de toda la organización social por la lógica del mercado.
En el mismo sentido, se plantea adversario a la idea de «Europa-fortaleza», celosa de sus propios privilegios e indiferente hacia los demás pueblos del mundo.
[11] Después de las elecciones, los socialistas volvieron a formar gobierno, debido a un pacto de izquierdas, con comunistas, ecologistas y bloquistas.