En contraposición al lema jeltzale del PNV (Jaungoikoa eta lege zaharra, 'Dios y la ley vieja'), el suyo fue Patria y Libertad.
La fundación de este partido ideológicamente a la izquierda del PNV, se dio en un momento en que la jerarquía católica apoyaba a los derechistas católicos españoles y atacaba duramente al nacionalismo vasco, prohibiendo incluso el bautizo de niños con nombres vascos.
El PRNV publicó una revista que se llamó Azkatasuna (Libertad en vascuence) de acuerdo a la ortografía sabiniana.
Junto a Francisco Ulacia y Pedro Sarasqueta, quien fue nombrado «presidente de honor» y renunció alegando que los títulos honorarios eran incompatibles con la historia vasca, otros miembros destacados de este grupo fueron Segundo Ispizua, Francisco Zubitarte y Víctor Gabirondo.
Se le considera como un claro precedente de Acción Nacionalista Vasca (EAE-ANV), primer partido nacionalista vasco de izquierdas.