El paisaje del Parque del Castillo de Montesquiu se caracteriza por un relieve roto por las sucesivas alineaciones montañosas que, en un sentido este-oeste, configuran el sistema prepirenaico oriental.Como es propio de toda esta zona, el paisaje se ha visto profundamente transformado por la huella del hombre, y en él se distinguen cuatro unidades biogeográficas principales: los bosques, los prados, los márgenes de las orillas y los cultivos.Los testimonios arquitectónicos más antiguos se remontan a la Alta Edad Media.Su origen puede encontrarse en una pequeña construcción de planta rectangular, aún conservada en las estructuras actuales del castillo, que probablemente fue edificada entre los siglos X y XI.Su origen parece poder encontrarse en una pequeña guardia o atalaya de planta rectangular que probablemente se construyó entre los siglos X y XI.Todas ellas fueron objeto de transformaciones muy importantes durante el siglo XVIII, o bien totalmente reconstruidas a lo largo del siglo pasado, como es el caso de la Casa Nova y la Solana.Cabe destacar el notable interés tipológico de las construcciones auxiliares, que en la comarca se llaman badius(soportales), caracterizados por el gran arco de medio punto que preside la fachada principal.