Está protegido como bien de interés cultural.
En el año 1894 se edificó una plaza de toros que tuvo poca duración.
[2] Tiene especial relevancia la forma en que está cerrada por pilares cuadrados de obra vista y una piedra artificial.
Encima de los pilares en la parte central, hay una cornisa que sirve para colocar la iluminación.
Entre los pilares hay incrustadas unas rejas de hierro con motivos geométricos.