[aclaración requerida] Además, las diferentes oleadas de peste provocaron que durante la Edad Media se abandonaran muchas pequeñas poblaciones, quedando vastas extensiones deshabitadas.
Además, él mismo arroja una visión de los historiadores en base a los documentos existentes.
Más recientemente se extendió la acepción de lugar yermo y despoblado, quizá siguiendo un criterio más etimológico que histórico, aunque el propio paso del tiempo ha convertido a la mayor parte de estas pardinas en lugares despoblados.
Y así lo define el Diccionario de Voces Aragonesas (Jerónimo Borao, 1859), como «despoblado, esto es, yermo o sitio que en otro tiempo tuvo población».
Sus habitantes solían tener un gran vínculo con los municipios cercanos y con otras pardinas, constituyendo una red de relaciones sociales y económicas que fue de gran importancia hasta finales del XIX.