Paradigma de apoyos

[3]​ Es decir, convierte la discapacidad no tanto en un problema de la persona que la padece sino de la sociedad en la que vive.

Una sociedad inclusiva que respete la diversidad y a la vez está atenta a las necesidades presentes en las personas, concebirá la intervención, más que como una acción meramente asistencial, como un rasgo esencial de su propia dinámica.

De esta manera, se disminuyen las limitaciones funcionales de las personas proporcionando intervenciones, servicios o apoyos que se centran en las conductas adaptativas, el estatus comunitario y el bienestar personal.

El financiamiento individualizado, un término genérico para describir los métodos de apoyo a la discapacidad que son financiados de forma individual, provee un presupuesto personal a los discapacitados con el objetivo de facilitar su autodirección, empoderamiento, independencia y calidad de vida.

Por su parte, existe menos evidencia acerca del impacto por funcionamiento físico, las necesidades insatisfechas y la eficiencia de costos.