Parábola del amigo inoportuno

Se asemeja a la parábola del juez injusto.

—¿Quién de vosotros que tenga un amigo, va a él a medianoche y le dice: “Amigo, préstame tres panes, porque un amigo mío ha venido a mí casa de viaje y no tengo qué ofrecerle”; y aquél, respondiendo desde adentro, le dice: “No me molestes; la puerta ya está cerrada y mis niños están conmigo en cama.

Esta parábola aparece en Lucas justo después de que Jesús enseña el Padre Nuestro, así que puede ser visto como parte de la enseñanza de Jesús a sus discípulos sobre la manera de orar,[1]​ siendo ésta un incentivo para hacerlo.

[2]​ La parábola del juez y la viuda encierra un mensaje similar.

[3]​ Las palabras con las que Jesús inicia la parábola son diferentes en griego, pero no tienen paralelismos modernos, así que I. Howard Marshall considera que es una forma característica de hablar de Jesús.

El vecino inoportuno (1895), William Holman Hunt .
Grabado de Jan Luyken ilustrando el final de la parábola, en la Biblia de Bowyer .