Papel con calzones

Un papel con calzones[1]​ (en inglés también se dice pants role o trouser role) es un papel en el que una actriz aparece con ropa masculina (los calzones son unos pantalones ajustados que llegan hasta la rodilla, una prenda masculina habitual cuando este tipo de papeles se introdujeron en el teatro).

En contra, un personaje operístico femenino vestido de mujer para engañar a otros personajes — esto es, que interpreta a una mujer que pretende ser un hombre (como Leonora en Fidelio o Gilda en el tercer acto de Rigoletto) — no se considera un "papel con calzones".

De las 375 obras producidas en los escenarios londinenses entre 1660 y 1700, se ha calculado que unas 89, casi la cuarta parte, contenían uno o más papeles para actrices vestidas de hombre.

Algunos críticos, por ejemplo Jacqueline Pearson, consideran que estos roles travestidos subvierten los roles sexuales tradicionales al permitir que las mujeres imiten el papel sexualmente agresivo de los libertinos hombres de la Restauración, pero Elizabeth Howe objeta que un estudio detallado de este disfraz masculino era "poco más que otra manera de mostrar a las actrices como un objeto sexual".

El descubrimiento del verdadero sexo del personaje sobre el escenario a menudo involucraba el descubrimiento de sus pechos, y hay muchas referencias en los prólogos y diarios de la época sobre la fascinación que despertaba ver las nalgas, caderas y piernas, normalmente ocultas por las faldas, delineadas a través del vestuario masculino.