Sus tierras productivas se hallan delimitadas por los esteros Santa Lucía, Lamas y la cañada Fragosa.
Payes impulsó la creación en 1959 de la Comisión de Fomento que él mismo presidiría, la cual crearía una Estación Sanitaria, el edificio Municipal, una Delegación del Registro Civil y un Destacamento Policial.
Es atractiva además la iglesia palmareña, edificio construido en la década de 1940 que guarda la famosa y milagrosa cruz llamada "Curuzú José", una reliquia del siglo XIX a la que los lugareños le rinden culto.
Al mismo tiempo se efectúa un atractivo festival folklórico de dos jornadas que organiza la municipalidad, en el anfiteatro que homenajea a dos grandes músicos del lugar, "Catarata" y "Gaucho Gavila".
El dueño decide conformar una partida con sus mejores hombres en busca de la boyada.
El dueño del campo brindo un agasajo a toda la peonada por los trabajos realizados.
Cumplió lo prometido cuando había dicho que con el mejor poste del rodeo iba estar fabricada la cruz de José.
La gente tomaba parte del madero para usarlo como talismán de la buena fortuna y desastillaban el madero hasta hoy en día se puede ver el detalle de las marcas que dejaban en la cruz.
Pero la Iglesia Católica no lo aceptaba, y el rendir culto a una imagen pagana era considearado un Sacrilegio.
Paso el tiempo y los pobladores armaron una comisión de festejos para entre todos poder recordar los milagros del Curuzú José.
Lo cierto es que transcurrido un tiempo el Curuzú José nuevamente fue venerado con la participación de los vecinos del paraje.
La comisión vio reflejada en la construcción de la capilla tanta devoción y pidió que la Iglesia Católica acepte al uruzú José como Santo Patrono del pueblo pero no fue fácil.