En su fachada principal destaca la puerta con dintel sobre pilastras de fuste acanaladas, sobre ella tres balcones de cuerpo central con salientes y con voladizo.
El resto de las fachadas son más austeras, excepto la que asoma al jardín con una amplia galería abierta al segundo piso.
El palacio está ocupado parcialmente y parte del edificio presenta un mal estado de conservación.
Forma un conjunto histórico junto a la iglesia de Santa María.
A pesar de su declaración como BIC, nunca se abre al público.