[2] Originalmente el poder judicial funcionó en una vieja casona ubicada en la calle Crisóstomo Álvarez, la cual resultó vetusta y pequeña para las nuevas necesidades de la corte.
También el Colegio de Abogados se asentó en el edificio hasta que inauguró su sede en los años 50.
[6][3] En 1993, durante el juicio a Mario Malevo Ferreyra por triple homicidio, Ferreyra se atrincheró en el palacio de Tribunales y luego salió con una granada en mano amenazando con detonarla y matar a todos los presentes en ese juicio, abandonando el lugar.
79 días después fue detenido por la policía en Santiago del Estero tras entregarse.
[7] Con el paso de los años, la mampostería sufrió agrietamientos gracias a la gran carga en su estructura.