Paisaje adaptativo

En biología evolutiva, los paisajes adaptativos (introducidos por primera vez por Sewall Wright en 1932) se utilizan para visualizar las relaciones entre genotipos (o fenotipos) y éxito reproductivo.

Los conceptos de altura y distancia son suficientes para conformar el concepto de paisaje adaptativo: Según Wright, los organismos procuran ocupar óptimos locales o picos adaptativos.

Para evolucionar a otro pico más alto, las especies tendrán primero que pasar por un valle de estadios intermedios menos adaptativos.

Si una especie estuviera dividida en pequeñas poblaciones, algunas podrían encontrar picos más altos.

Por lo tanto, el modelo ilustra cómo la selección natural conduciría a la población a escalar el pico más cercano, mientras que la deriva genética causaría un deambular aleatorio por el paisaje.

Esquema de un paisaje adaptativo. Las flechas indican el flujo preferente de una población en el paisaje; los puntos A, B y C son óptimos locales. La bola roja indica una población que se mueve desde una aptitud muy baja hasta lo alto de un pico. Ilustración de C.O. Wilke, 2001.