Aunque la señal del EEG se adquiere con más fuerza en torno a los electrodos parietales, se ha sugerido que existen interacciones entre las regiones frontales y temporales, así como con algunos lugares del encéfalo profundo.
[1] Se piensa que la misma onda p300 está compuesta por dos ondas secundarias conocidas como "señales P3a y P3b".
También modulan la actividad P300 influencias acetilcolinérgicas y GABAérgicas, actuando el GABA mediante la producción de potenciales inhibitorios post-sinápticos (PIPS) que tienden a disminuir la amplitud de onda e incrementar la latencia y la acetilconina actuando como modulador con efectos opuestos al GABA.
Los registros intracraneales han dado credibilidad a la teoría de contribuciones ampliamente distribuidas.
[5] Desde esta perspectiva el papel del circuito noradrenérgico es potenciar los estímulos significativos para la toma de decisiones ejecutivas.
Los estudios mediante fMRI sugieren que estos componentes se pueden localizar en diferentes regiones, en el que la P3a es principalmente un fenómeno de las cortezas frontales e insulares y la P3b se origina de las regiones parietal inferior y temporal.
Los investigadores también están divididos en cuanto a si los potenciales evocados en general se generan como un modo inducido por estímulo (las poblaciones neuronales reaccionan disparándose o no ante el estímulo presentado) o en un modo de "reiniciado de fase" (las poblaciones neuronales reaccionan enfocando sus patrones de disparo en una fase particular basado en un estímulo).Una evidencia reciente que se basa en los estudios sobre P300 sugiere que ambos métodos probablemente contribuyen a la formación de un potencial evocado.
[3] Así pues, la P300 no se distingue por la dinámica de fondo, pero tampoco está completamente explicado por ella.
[6] Estudios recientes que intentan desarrollar las bases para esta reducción han identificado un polimorfismo puntual en un gen que codifica la catecol-O-metiltransferasa (COMT) una enzima crítica en la eliminación de la dopamina en las regiones corticales del cerebro.
[9] Estas variaciones precisan de gran cuidado con el uso del P300 como medida diagnóstica.
[11] No obstante existe una cantidad significativa de variación entre géneros en ambos subcomponentes y en la misma P300.
En un estudio que empleaba estudiantes universitarios sanos que habían experimentado un daño cefálico suave en el pasado, los sujetos afectados no revelaban diferencias con los controles en test de memoria y atención aunque aún mostraban amplitudes reducidas y latencias incrementadas en el marco de un paradigma odd-ball.
La estimulación de secuencias más complicadas que una simple rutina odd-ball muestran variaciones en las características P300.
Por ejemplo, cuando se asignan elecciones aleatorias a situaciones percibidas como beneficios o pérdidas las P300 demuestran la variabilidad de la magnitud recompensa/perdidas.
Esta práctica ha recibido recientemente una mayor permisibilidad legal, mientras que la poligrafía ha visto como se reduce su uso, en parte debido a aspectos inconscientes e incontrolables de la P300.
Puesto que el deterioro cognitivo a veces esta correlacionado con modificaciones en la P300, la forma de onda a veces se puede utilizar como medida para la eficacia de distintos tratamientos para la función cognitiva.
La combinación de la fila y columna que evoca la respuesta localiza el carácter deseado.
Si el procesamiento visual puede darse sin la conciencia del sujeto, se necesitarán tomar medidas adicionales para determinar los límites de los potenciales evocados acompañantes.