Nacido en 1876 en Alemania, se trasladó a Barcelona para dedicarse la importación y comercio de productos coloniales.
Gmelin nunca jugó a fútbol con la camiseta azulgrana, aunque se vistió de corto para arbitrar algunos partidos.
Con Gmelin el Barcelona vivió la mejor temporada deportiva de su historia hasta ese momento, conquistando su primer triplete.
[4] También hubo cambios en el uniforme: los pantalones de color blanco, usados desde la fundación del equipo, se reemplazaron por los azules, que siguen vigentes.
Con el suizo al frente del club, volvió a formar parte de la directiva como vocal, la temporada 1911-12.