Oliveira es un municipio brasileño del estado de Minas Gerais, localizado a 150 kilómetros a suroeste de Belo Horizonte, que tiene 41181 habitantes, conforme las últimas estimativas del IBGE.
Con el fin de la esclavitud en Brasil y el incentivo del gobierno para la inmigración, vinieron para la ciudad muchos colonos sirio-libaneses, que más tarde dominaron el comercio.
Oliveira se encuentra a una latitude 20º41'45" sur y la una longitud 44º49'37" oeste, a una altitud media de 982 metros, en el circuito regional conocido como Campos de las Vertientes.
La influencia se expresa por las grandes mansiones del siglo XIX, estatuas y monumentos.
La ciudad es cortada por el Ferrocarril Centro-Atlântica, que conecta el interior de Brasil al litoral.
El área urbana se divide en 51 barrios o regiones, en los cuales están distribuidas más de 550 calles: Los indicadores sociales del municipio en 2000 (Caminos - UFMS) Un hecho relevante es el envejecimiento de la población en la ciudad, más anticipado del que el ya previsto por la población de Brasil en general.
Bajas tasas de natalidad y mortalidad en la ciudad es la principal causa.
Teniendo en cuenta el ingreso promedio mensual per cápita, Oliveira es la ciudad más importante en comparación con las ciudades vecinas:
En consonancia con el censo del IBGE en 2010, existen 34938 católicos en Oliveira, lo que comprende en torno a 84% de la población.
Su figura principal es el Cainágua, que no es más que una réplica adaptada de los enmascarados del Carnaval de Venecia, donde los nobles se mezclaban a la multitud en las fiestas.
Otra característica peculiar del carnaval oliveirense es el bloque "Por el amor de Dios", creado por José Alberto Machado da Silva y al que luego daría continuidad Mauricio Almeida, que alegra las noches del viernes con sus audaces juerguistas.
Al igual que el carnaval, son muy significativas su Semana Santa y el Congado.
Los puntos turísticos más comentados y buscados son: "La Gran Estatua del Cristo Redentor, la Casa de la Cultura Carlos Chagas, y la Vieja Iglesia Matriz en el estilo barroco.
Recientemente, el centro de la ciudad fue considerada histórica y está protegido por el patrimonio cultural.
Lo que entra en consonância con las nuevas tendencias de preservación, orientadas por la UNESCO, tratando el paisaje cultural como patrimonio histórico.