Elegida en 1620 por Champlain para instalar el Fuerte de San Luis, tuvo desde el inicio de la colonia y un papel administrativo y militar: las alturas estratégicas del Cap Diamant han determinado su vocación.
Comenzadas a fines del siglo XVII, bajo el Régimen francés, continuaron hasta 1832, cuando los británicos terminaron la construcción de la Ciudadela.
Además, al final del siglo XIX se quisieron demoler las fortificaciones, considerándolas innecesarias e incluso como un obstáculo para el desarrollo urbano.
Es parte del distrito histórico y los tesoros que guarda le han valido el reconocimiento de la Unesco, en 1985.
La administración pública y las instituciones siguen ocupando un lugar importante en el corazón de la ciudad.