El término nuevo ruso (новый русский) designa, generalmente de forma despectiva, a la nueva clase social adinerada que surgió en Rusia tras la caída del comunismo.
Con la Perestroika iniciada por Gorbachov en 1987, dio comienzo un proceso de liberalización del mercado en Rusia para intentar salvar la economía de la debacle provocada por la economía planificada.
Sin embargo, surgió paralelamente un proceso de cartelización donde una minoría relacionada al poder público, y con acceso a negocios de exportación, tales como el petróleo, o beneficiados por la privatización de industrias y empresas estatales, amasaron inmensas fortunas en muy poco tiempo.
Esta minoría, normalmente relacionada con las clases dirigentes del antiguo Partido Comunista (la élite denominada nomenklatura)[cita requerida] o con los servicios secretos, representa en torno al 1% de la población; aproximadamente un millón y medio de personas,[1] pero se le acusa de haber efectivamente monopolizado las riquezas de Rusia en el ámbito comercial y financiero, creando así una enorme brecha económica y social entre la élite y las masas, donde en la práctica ha desaparecido el concepto de clase media.
También se les caracteriza por su exclusivismo, habiendo proliferado los locales de lujo (restaurantes, tiendas, cabarets) sólo accesibles para este restringido círculo, denominado tusovka (en ruso: "тусовка"), con tendencia al inmovilismo social y reforzar los contactos interpersonales restringidos para evitar la penetración en esta élite de individuos recién llegados.