Su objetivo era destruir los once puentes que unían el Mandato con los países vecinos, Líbano, Siria, Transjordania y Egipto, con el fin de inmovilizar su transporte.
Sólo uno de los operativos falló: hubo 14 víctimas mortales y 5 heridos del Palmaj en el puente sobre el río Kziv.
Los miembros del Palmaj pudieron regresar fácilmente debido a la confusión general.
En primer lugar, la SHAI (Servicio de Inteligencia del Hagana) y patrullas de las fuerzas del Palmaj, realizaron el programa para llevar a cabo la operación.
Estaban disimulados como amantes para disfrutar de la naturaleza o como excursionistas.