La Nínfa de la Caracola es una estatua y fuente de hierro fundido situada en una glorieta del Parque de la ciudad española de Málaga, y que recibe el apodo de "La Muñeca" al haberse ubicado cerca de unos corralones que llevaban ese nombre.
La escultura tiene una altura de 1,60 metros y representa a una ninfa que se encuentra sobre una fuente y elevada sobre un pedestal rocoso que vierte agua desde una caracola que sujeta en sus brazos.
Fue encargada por el ingeniero José María de Sancha a la fundición francesa A. Durenne que la construyó en Sommevoire entre 1877 y 1878.
La estatua se instaló inicialmente en la Plaza de la Victoria, pero en 1922 se trasladó al Parque de Málaga y allí permaneció en una de sus glorietas siendo protagonista de muchas postales.
Tras muchos años almacenada, fue restaurada por Salvador Parra en el Taller de Restauración del Patrimonio Histórico Artístico del Ayuntamiento en 2007 y restituida a su ubicación en el Parque, cerca de la Ninfa del Cántaro.