Posteriormente se traslada al destino habitual de la época para los emigrantes provenientes de Rusia – a Serbia, donde se gana la vida trabajando como leñador y trabajador no calificado en un molinero.
El tema principal – la estepa, su stanitsa natal, Rusia, los cosacos y su destino.
Al iniciarse la Segunda Guerra Mundial Turovérov, al igual que muchos otros sus coterráneos cosacos, se incorporó voluntariamente a la Legión Extranjera francesa, en el Primer Regimiento de Caballería y combate en sus filas contra las tropas alemanas en África.
Durante la Segunda Guerra Mundial y después de esta, Turovérov escribió numerosas obras literarias, las cuales fueron publicadas en distintos medios europeos, principalmente en Francia en años 1942, 1945 y 1955 respectivamente.
El legado literario de Turovérov fue reconocido por los escritores, historiadores extranjeros y rusos, Iván Bunin entre otros.