Sus padres fueron el magistrado español Juan Jiménez de Lobatón y Morales, oidor de la Real Audiencia de Lima, y la limeña Francisca Ventura de Azaña y Valdés.
[1] Inició sus estudios en el Colegio Real de San Martín en 1709.
Pasó al Cusco, donde fue elegido alcalde (1721) y luego, procurador general de la ciudad (1722).
Nombrado Tesorero General del Tribunal de la Santa Cruzada en aquella diócesis, hubo de efectuar algunos viajes a través de los pueblos del altiplano; y en cierta oportunidad fue interceptado en Lampa por algunos soldados que le requisaron ciertos géneros de contrabando que llevaba (diciembre de 1742); pero interpuso reclamación ante el virrey marqués de Villagarcía, quien ordenó que todo le fuera devuelto según la relación formulada en el acto de despojo.
La Paz/Lima: Plural/ Instituto Francés de Estudios Andinos, pp.