Son células planas que tapizan casi por completo la superficie del alvéolo pulmonar y ejercen una función estructural.
Los neumocitos tipo I debido a su escaso espesor, 0.5 micrómetros en algunos sectores, hacen posible que los gases se difundan a su través y pasen desde y hacia la sangre que circula en los capilares del alvéolo.
[4] Se encuentran distribuidos en pequeños grupos entre los neumocitos tipo I.
El surfactante pulmonar se mezcla con agua reduciendo su tensión superficial y formando una fina capa que recubre toda la superficie alveolar.
Los neumocitos tipo II al dividirse puedan dar origen a nuevos neumocitos de tipo I y reemplazar a los dañados, constituyendo por tanto la principal fuente de su renovación.