El poema fue recitado inicialmente en el café Pilvax en Pest el 15 de marzo de 1848, donde se reunía Sándor Petőfi y sus amigos intelectuales Mór Jókai, Pál Vasvári y Gyula Bulyovszky.
El poema junto con los 12 puntos que exigían más independencia del poder absoluto de los habsburgo pronto fueron recitados por toda la ciudad, donde las calles húngaras se llenaron de ingenieros, médicos profesores, iniciándose la protesta contra los austríacos.
Rabok voltunk mostanáig, Kárhozottak ősapáink, Kik szabadon éltek-haltak, Szolgaföldben nem nyughatnak.
Sehonnai bitang ember, Ki most, ha kell, halni nem mer, Kinek drágább rongy élete, Mint a haza becsülete.
Hol sírjaink domborulnak, Unokáink leborulnak, És áldó imádság mellett Mondják el szent neveinket.
Hombre granuja de ningún lado, Quien, si es necesario, no se atreve a morir, Para quien es más preciada su andrajosa vida, Que el honor de su patria.
El nombre húngaro será nuevamente hermoso, A su excelsa y antigua fama; Lo que los siglos nos ensuciaron, Lavémos la humillación!