Negacionismo del Holocausto

[15]​ Por esta razón, el negacionismo del Holocausto generalmente se considera una teoría de conspiración antisemita.[30]​ Se llevaron a cabo operaciones similares en Belzec, Treblinka y otros campos de concentración.[37]​[38]​ En 1945, el general Dwight D. Eisenhower, comandante supremo aliado, anticipó que algún día se intentaría recaracterizar la documentación de los crímenes nazis como propaganda y tomar medidas contra ella.Las intenciones del fiscal jefe Gideon Hausner no eran solo demostrar la culpabilidad de Eichmann personalmente sino presentar material sobre todo el Holocausto, produciendo así un registro completo.[53]​ Harry Elmer Barnes, que en su momento fue un historiador estadounidense mainstream, asumió una postura de negacionismo del Holocausto en sus últimos años.[57]​ Afirmó que para justificar los "horrores y males de la Segunda Guerra Mundial", los Aliados convirtieron a los nazis en el "chivo expiatorio" por sus propios errores.Rassinier era él mismo un superviviente del campo de concentración (estuvo recluido en Buchenwald por haber ayudado a los judíos franceses a escapar de los nazis), y los negacionistas siguen citando sus trabajos como investigaciones académicas que cuestionan los hechos aceptados del Holocausto.[61]​ El propósito de Rassinier, un furibundo anticomunista, fue minimizar la barbarie nazi para así destacar mejor los horrores del bolchevismo.[63]​[64]​ App defendió a los alemanes y la Alemania nazi durante la Segunda Guerra Mundial.Publicó numerosos artículos, cartas y libros sobre el negacionismo del Holocausto, creando rápidamente seguidores leales.[65]​ En 1978, Willis Carto fundó el Institute for Historical Review (IHR), una organización dedicada a desafiar públicamente la historia comúnmente aceptada del Holocausto.[63]​ El IHR buscó desde el principio establecerse dentro de la amplia tradición del revisionismo histórico, solicitando simpatizantes que no fueran de origen neonazi como James J. Martin y Samuel Edward Konkin III, y promoviendo los escritos del socialista francés Paul Rassinier y el historiador estadounidense contra la guerra Harry Elmer Barnes, en un intento por demostrar que el negacionismo del Holocausto tenía una base de apoyo más allá de los neonazis.Mel Mermelstein escribió una carta a los editores de LA Times y otros, incluido The Jerusalem Post.[71]​ El libro de Deborah Lipstadt, Denying the Holocaust, de 1993, criticó duramente a varios negacionistas del Holocausto, incluido el autor británico David Irving, por falsificar deliberadamente pruebas para justificar sus conclusiones preconcebidas.El historiador estadounidense Christopher Browning, un testigo experto para la defensa, escribió un ensayo exhaustivo para la corte que resume la gran cantidad de evidencia sobre la realidad del Holocausto, y bajo un interrogatorio cruzado, contrarrestó efectivamente todos los argumentos principales de Irving en contra.El juez, el juez Charles Gray, finalmente emitió un veredicto largo y decisivo a favor de Lipstadt que se refirió a Irving como un "negador del Holocausto" y "polemista pro nazi de derecha".El Centro Simon Wiesenthal, con sede en Los Ángeles, instigó un boicot contra los anunciantes de Bungei Shunju, incluidos Volkswagen, Mitsubishi y Cartier.Durante el juicio de septiembre, Baykam expuso al verdadero autor del libro como Adnan Oktar.[80]​ Tres años más tarde, el Vlaams Blok fue declarado culpable de racismo y optó por disolverse.[103]​ Unos meses antes de que se abriera, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores iraní, Hamid Reza Asefi, declaró: "El Holocausto no es un asunto sagrado que no se pueda tocar.[110]​ La respuesta académica al negacionismo del Holocausto se puede dividir en tres categorías.El negacionismo del Holocausto es obra de fanáticos, debemos rechazar sus afirmaciones falsas siempre, en todo lugar y por quienquiera que las hagan.Los principales reclamos que causan que el negacionismo del Holocausto difiera de los hechos históricos son: Otras incluyen las siguientes: El negacionismo del Holocausto es ampliamente vista como un fracaso al adherirse a los principios para el tratamiento de la evidencia que los historiadores dominantes (así como los académicos en otros campos) consideran como básica para la investigación racional.[137]​[138]​ Fue aún más atestiguado por las fuerzas aliadas que ingresaron a Alemania y sus estados asociados del Eje hacia el final de la Segunda Guerra Mundial.Numerosos relatos han sido dados por negadores del Holocausto (incluida la evidencia presentada en casos judiciales) de hechos y pruebas alegados; sin embargo, investigaciones independientes han demostrado que estas afirmaciones se basan en investigaciones defectuosas, declaraciones sesgadas o incluso en pruebas deliberadamente falsificadas.Quienes se oponen al negacionismo del Holocausto han documentado numerosas instancias en las que tal evidencia fue alterada o fabricada (ver Proyecto Nizkor y David Irving).[144]​ El negacionismo del Holocausto es explícita o implícitamente ilegal en 17 países: Alemania, Austria, Bélgica, Chequia, Eslovaquia, Francia, Hungría, Israel, Liechtenstein, Lituania, Luxemburgo, Países Bajos, Polonia, Portugal, Rumania, Rusia, y Suiza.[145]​[146]​ Rumanía negó oficialmente que el Holocausto ocurriera en su territorio hasta la Comisión Wiesel en 2004.El profesor de literatura francesa Robert Faurisson, por ejemplo, fue condenado y castigado bajo la Ley Gayssot en 1990.La negación del Holocausto, sostienen, es "la peor forma de racismo y su versión más respetable porque pretende ser una investigación".
Fotografía de varios prisioneros en el campo de concentración de Buchenwald tomada durante su liberación el 16 de abril de 1945. El 6 de mayo de ese mismo año, The New York Times [ 1 ] ​ publicó una versión modificada de la fotografía en la que el hombre de pie fue retirado de esta. [ 2 ] ​ Varios negacionistas sostienen que esta, y varias otras evidencias documentales del Holocausto, son falsificaciones hechas después de terminada la Segunda Guerra Mundial . [ 3 ]
Los miembros de una unidad Sonderkommando 1005 posan junto a una máquina trituradora de huesos en el campo de concentración de Janowska en la Polonia ocupada por los alemanes (junio de 1943 - octubre de 1943)
12 de abril de 1945: los generales Eisenhower, Omar Bradley y George S. Patton inspeccionan, en el campo de trabajos forzados de Ohrdruf, una pira funeraria improvisada