Natalia Ponce de León

[2]​ El 27 de marzo del 2014, Jonathan Vega, un hombre obsesionado con Ponce,[3]​ se presentó en el edificio en el que ella vivía al norte de Bogotá[4]​ y le arrojó un litro de ácido sulfúrico que le quemó la cara, los brazos, una pierna y medio abdomen.

[5]​ Tras sobrevivir a la agresión y tras 16 operaciones,[4]​ Ponce de León ha protagonizado varias campañas para llamar la atención sobre los ataques con ácido que sufren muchas mujeres cada año en Colombia.

[6]​ Desde la denuncia[7]​ y a partir de su juicio, también se ha conseguido que las penas por estos ataques sean de hasta "30 años si se causa deformidad o daño permanente, o hasta los 50 si el ataque es contra una mujer o un menor de edad".

Extrañada por no ver a Bernardo, Natalia le preguntó al individuo quién era; casi inmediatamente el extraño se dio vuelta y le lanzó a la joven un líquido en el rostro y a continuación el sujeto se alejó del lugar, apurado y corriendo de la escena.

Para el momento en el que fue atacada, en Colombia muy poco se sabía sobre el tratamiento de heridas causadas por ácido, algo que Natalia pudo notificar al llegar a la clínica.