Nanotubo inorgánico

Un nanotubo inorgánico es una molécula cilíndrica compuesta a menudo por óxidos metálicos, y similar morfológicamente a un nanotubo de carbono.Se ha observado que los nanotubos inorgánicos ocurren naturalmente en algunos depósitos de minerales.[1]​ Aunque desde 1930 Linus Pauling mencionó la posibilidad de capas curvadas en minerales,[2]​ los nanotubos inorgánicos sintéticos no aparecieron hasta que Reshef Tenne y otros reportaron en 1992 la síntesis de nanotubos compuestos de disulfuro de tungsteno.Los nanotubos inorgánicos son más pesados que los nanotubos de carbono y no tan fuertes bajo estrés de tensión, pero son particularmente fuertes bajo compresión, conduciendo a potenciales aplicaciones en resistencia de impacto como chalecos a pruebas de balas.Como la borazina es isoelectrónica con el benceno, la sustancia lógicamente puede formar hojas, los análogos del fulereno y los análogos de nanotubos.