Esta especie ha sido considerada durante mucho tiempo como una subespecie de la cobra escupidora de cuello negro (Naja nigricollis), pero diferencias morfológicas y genéticas han llevado a su reconocimiento como especie diferente.
[2] Actualmente se reconocen dos subespecies bajo el nombre Naja nigricincta:[1] La subespecie llamada N. n. nigricincta, generalmente conocida como cobra escupidora rayada occidental, nombre debido a las líneas oscuras que recorren longitudinalmente el cuerpo de la serpiente, y la subespecie N. n. woodi, generalmente conocida como cobra escupidora negra, de un color negro sólido y que solo se encuentra en las áreas desérticas de Sudáfrica.
Como toda especie del género Naja, esta serpiente puede aplanar la cabeza y el cuello como si se tratara de una capucha.
La cabeza y la capucha son uniformemente de color marrón oscuro o negro.
Estas serpientes también pueden escupir su veneno con gran exactitud, dándoles a sus enemigos y causándoles ceguera temporal o permanente.