NOAEL

[2]​ Hasta hace poco se hablaba de dosis sin efecto pero la experiencia ha enseñado que es preciso ser prudentes y sólo admitir que hay dosis o niveles sin efecto observable (NOEL), ya que muchas veces las consecuencias de una o repetidas exposiciones no se manifiestan exteriormente o sólo lo hacen después de cierto tiempo.

Para establecer un NOAEL se necesitan múltiples dosis, una población amplia e información complementaria para garantizar que la ausencia de respuesta no es un mero fenómeno estadístico.

[4]​ Los estudios dosis-respuesta para compuestos tóxicos que no son cancerígenos buscan establecer puntos finales de toxicidad, como son el daño al hígado, a los riñones y a los sistemas respiratorio, cardiovascular, nervioso, reproductivo o inmune.

[5]​ En el ámbito de las sustancias no carcinógenas se introdujeron factores de seguridad para compensar las incertidumbres que presentaban los datos toxicológicos (NOAEL) y su aplicabilidad a poblaciones humanas grandes y heterogéneas.

UU. sugirió que para los no carcinógenos ya no era necesario confiar exclusivamente en los modelos matemáticos y que la extrapolación del NOAEL aplicando los factores de seguridad era considerado aceptable.

En este ejemplo podemos ver cómo esta metodología puede dar lugar a errores en la estimación del NOAEL debido al espaciamiento de las dosis.

En esta todas las dosis empleadas en el estudio originan efectos adversos que presentan diferencias estadísticamente significativas respecto al grupo control.

En consecuencia en este supuesto no se puede establecer un NOAEL, y el LOAEL sería 1 mg/kg/día (la dosis más baja que produce efectos adversos observables).