Paradójicamente, el edificio está situado donde también funcionó la antigua morgue de los cementerios del Buceo.
[8][9] En ese entonces, el Buceo no era considerado una zona urbana sino un balneario concurrido por la población concentrada en la Ciudad Vieja.
[6] El emprendimiento comercial fracasó, por lo que en 1934 la Intendencia le cedió el edificio al Servicio Oceanográfico y de Pesca, que lo convirtió en la sede de la estación Oceanográfica, la cual funcionaria como como tal hasta 1940, tras lo cual permaneció cerrado hasta 1956.
[10] El museo cumple con un rol social y educativo, difundiendo conocimientos relativos al área de ciencias naturales.
Gracias a él se consigue estudiar, conservar e investigar la relación entre los seres vivos y su hábitat.