Itagüí El Museo Comunitario Graciliano Arcila Vélez es una experiencia de carácter sociocultural que hace parte de las estrategias diseñadas por la Corporación SIPAH con el apoyo de la comunidad local, para alcanzar la apropiación social del patrimonio cultural y natural, tras los logros alcanzados con el proyecto La Motomuseo Itinerante – Arte, ciencia y cultura sobre ruedas, el cual se desarrolla desde el año 2009 en el municipio de Itagüí, siendo reconocido en los años 2010 y 2012 como una experiencia exitosa en desarrollo creativo del patrimonio a nivel del Departamento de Antioquia, premiada por la ministra de Cultura y la primera dama de la Nación con un incentivo económico para su labor (2010) y una publicación de la experiencia (2013), presentándose en la Universidad Nacional sede Bogotá, en el marco del primer simposio internacional de arte rupestre.
Para el año 2011, el Ministerio Nacional de Cultura, hace entrega de un reconocimiento como experiencia destacada en patrimonio a nivel nacional.
Para el año 2011, el Ministerio Nacional de Cultura, hace entrega de un reconocimiento como experiencia destacada en patrimonio a nivel nacional.
Un museo comunitario desde su concepción debe y tiene que ser una herramienta para que la comunidad afirme la posesión física y simbólica se su patrimonio, a través de sus propias formas de organización, es un espacio donde los integrantes de la comunidad construyen un autoconocimiento colectivo, propiciando la reflexión, la crítica y la creatividad, fortalece la identidad, porque legitima la historia y los valores propios, proyectando la forma de vida de la comunidad hacia adentro y hacia fuera de ella.
Objetivos El museo ha logrado consolidar una propuesta artística, cultural y educativa en torno a una población que por décadas ha sido estigmatizada a raíz de la violencia, pero que a los ojos de su equipo de trabajo, se ha develado una cara totalmente diferente, aquella que habla de la desatención del estado y la falta de inclusión y oportunidades para que niños, jóvenes y adultos hagan uso de su capacidad de creación; la misma que han plasmado en los 25 talleres que el museo les ha ofrecido y a los cuales cerca de 600 personas al año se han hecho partícipes de manera directa.