Consiste en escoger muestras representativas de un modelo (por ejemplo una fotografía para un posterior procesado).
Si nos fijamos en uno de los píxeles vemos que predomina un único color o tono.
Este color o tono será el que posteriormente se cuantificará y codificará.
Al muestrear, dependiendo de la dimensión del píxel escogido, obtendremos un muestreo con más o menos resolución espacial.
Cuanto menor sea la dimensión del píxel, mayor será la resolución espacial.