Monumento a Aida de la Fuente
[1][2] El paisaje urbano de esta ciudad se ve adornado por obras escultóricas, generalmente monumentos conmemorativos dedicados a personajes de especial relevancia en un primer momento, y más puramente artísticas desde finales del siglo XX.[3] La escultura, hecha en bronce, es obra de Félix Alonso Arena y está datada en 1997.[2][4] Es una obra que se erigió por suscripción popular, con la finalidad de recordar la Revolución asturiana de octubre de 1934 en la conocida figura de Aida de la Fuente (1918-1934), popularmente llamada «la Rosa Roja».[2] Se trata de un monolito de piedra que está atravesado a media altura por un bloque que contiene un mapa de Asturias en altorrelieve y presenta la leyenda «Revolución de octubre de 1934».Todo queda completado mediante un medallón de bronce con el rostro en relieve de Aida de la Fuente.