Mediante la Constitución de Rionegro en 1863 las divisiones administrativas de Boyacá sufrieron varias modificaciones y según la Ley 10 del mismo año se adoptó una nueva división en 6 departamentos: Casanare, Tundama, Norte, Occidente, Oriente y Centro.
Presenta alturas que van desde los 300 m s. n. m. en las riberas bajas del Río Túa y casco urbano, hasta los 2.000 m s. n. m. en la Cuchilla Palmichal en límites con el departamento de Boyacá, con una temperatura promedio de 27 °C [cita requerida].
En algunos sectores como en Guaneyes, Casical y Tierra Grata se presenta inestabilidad ocasionado por la actividad tectónica de la región [cita requerida].
Se caracteriza por una actividad neotectónica basculada en forma diferencial hacia la parte oriental [cita requerida].
Su litología presenta una superficie de gravas y cantos que cubren la formación caja.
Se observa erosión regresiva muy activa, difusa y laminar que modifica significativamente su morfología [cita requerida].
El sotobosque está formado por numeroso arbustos, bejucos leñosos, plantas herbáceas y epífitas[cita requerida].
A continuación se enumeran las especies encontradas en sitios estratégicos: Con visita de campo se pudo determinar las especies más predominantes en la zona, encontrándose las siguientes: yarumo (Ceecropia sp), hobo (Spondias mombin), tuno (Miconia sp), gualanday (Jacaranda caucana), igual (Pseudosamanes guachapele) y flor amarillo entre otras [cita requerida].
Entre las especies que se observan con más frecuencia están : perro de monte (Eira barbara), cachicamo (Dasypus novencinctus), lapa (Agouti paca), tintín, (Dasyprocta fuliginosa), ardilla (Sciurus granatensis), ratón de monte (Proachymis urichi), puerco espín (Coendou prehensilis), venado (Mazama americana), zorro sabanero (Crisocyon brachyurus), cachicamo sabanero (Dasypus sabanicola), venado (Odocoileus virginianus).
La avifauna de la región es la que presenta mayor abundancia por su adaptación a las condiciones antrópicas.
Entre las especies de zonas abiertas se encuentra la perdiz (Colinus cristus), paloma naguiblanca (Zanaida auriculata), tortolita roja (Columbina talpacoti), periquito (Forpus conspicillatus), bichajue (Pitangus sulphuratus), tijereto (Tyrannus savana), atrapamoscas (Mylozetetes cayenensis), golondrina (Tachicineta albiventer), mirla blanca (Mimus gilvius).
Entre las especies que se encuentran con mayor frecuencia en los bosques secundarios y rastrojos altos están el toche (Icterus nigrogularis), oropendolá (Psarocolius viridis), azulejo (Thraupis episcopus) y el cardenal (Rampocelus carro) [cita requerida].
En otros hábitats se pueden observar otras serpientes tales como la Boa constrictor, Botrhopos atrox, Corallus enhydris, Entodeira anulata, Leptophiae acetulla, Mactigodryac bifontuo, Mioruruo izocenus, Oxhipepus petola, etc. Se observan algunos lagartos tales como Ameiva ameiva, Apolis auratus, Cnemidophorus lemniscatus, Gonatades humeralis e iguana [cita requerida].
Allí se realizó la II Válida Para el Circuito Colombiano de Parapente Copa Monterrey 2008.
Circunscritos dentro de la cultura llanera, musicalmente se acostumbra el joropo y el pasaje con sus variaciones.