Monte de Piedad de Salamanca
Este tipo de instituciones se propagan enseguida por toda la geografía italiana, traspasando sus fronteras llegará a otras zonas europeas y, entre ellas, a la Península Ibérica[2].Los Montes de Piedad pretendían ser una alternativa a los préstamos que, con elevados intereses proporcionaban los usureros.José Francisco Álvarez, regidor que fue de Salamanca, la otorga en virtud del poder que le había concedido la difunta María Ana de Rueda Maldonado, su mujer.El Monte nacía para a socorrer a los parientes del matrimonio, dejando al marido la decisión y responsabilidad del establecimiento de las ordenanzas que debían regirlo y los detalles de los familiares que podían beneficiarse de esta memoria.No obstante, esta cantidad queda reducida a 110.000 reales de vellón, ya que se decide reservar 50.000 reales de vellón para los gastos del funeral.