Monasterio de San Sebastián de Sull

El doctor Manuel Riu Riu, realizó diferentes excavaciones (entre los años 1971 y 1977, en ocho campañas), que sirvieron para dejar al descubierto, liberando el conjunto de las ruinas de una masía posterior, un edificio singular en la arquitectura prerrománica catalana y una necrópolis bastante importante.

Se sigue la pista todo descendente hacia el valle de Gresolet, en el punto bajo de la pista encontramos la casa-refugio «el herrero», lugar donde debemos dejar el vehículo para tomar el camino que nos conducirá a las ruinas del monasterio.

El monasterio fue fundado por el presbítero Daniel y la devota Honesta a inicios del siglo X.

En dicho entierro se localizó una pieza de cerámica gris, similar a un cántaro, situada entre las tibias del difunto.

El hallazgo, junto con otras localizadas en la comarca del Bergadá y el Bages, hace pensar,según el Dr. Río, que durante el siglo XII, cuando la cristianización debía estar más arraigada en la zona, hubo un retorno a costumbres precristianas, «enterrando un muerto con un recipiente para beber, probablemente lleno de agua, para mitigar la sed durante el viaje de su espíritu hacia la Eternidad».

Planta de la iglesia del monasterio.