Fahr y Einsiedeln son en la actualidad el único monasterio dúplice del mundo.
El monasterio no ha sido parte de ningún municipio durante la mayor parte de su historia, aunque los trámites administrativos han sido llevados a cabo por las autoridades de Würenlos desde finales del siglo XIX, además de que las monjas han ejercido su derecho a voto en dicha comuna.
Los terrenos sobre los que se asienta el monasterio de Fahr fueron cedidos en el año 1130 por Lütold II y su mujer Judenta[2] a la abadía de Einsiedeln con el fin de fundar un monasterio benedictino a orillas del río Limago, junto a Weiningen y Unterengstringen-Oberengstringen, y que fue dedicado a Nuestra Señora.
En el transcurso desde 1743 hasta 1746, la iglesia del monasterio fue decorada con frescos de los hermanos Torricelli.
Además, otros productos agrícolas son elaborados en el monasterio, incluyendo licores y miel.