Dirigido por Jean Rouch, el filme fue rodado en la ciudad marfileña de Abiyán.
Estos inmigrantes viven en la miseria, y sueñan con llegar algún día a los barrios limítrofes de la Meseta (el distrito comercial e industrial) y el antiguo barrio africano de Adjame.
Realizan trabajos de poca paga como estibadores y obreros y por la noche ahogan sus penas en los bares mientras sueñan con sus vidas idealizadas.
[3] La película fue recibida con mucha aclamación, es reconocida como una obra influyente en el lanzamiento del movimiento Nouvelle vague y fue galardonada con el Premio Louis Delluc de 1958.
[5] La cinta fue pionera en el uso de actores no profesionales, rasgo que Jean-Luc Godard usaría para elaborar su película Breathless y dar forma a la nueva ola del cine francés.