Mitología Pech

Este viajó con Piritakata dios del Arcoíris para poder llegar al fin del mundo y ahí descubrió que el universo esta sostenido por cuatro pilares; que constantemente son cambiados, incluso él sirve de pilar brevemente como parte de su experiencia de conocimientos, además se da cuenta de que el mundo es como una naranja rodeada de agua por todas partes y que es movida por los espíritus malos y buenos, durante esta experiencia el es aconsejado por la pirikataka quien le dice que debe estar alerta porque cada tres días los pilares son cambiados y él debe aprovechar ese momento para escaparse.

[5]​ Cumplidas sus misiones en este viaje espiritual, este es recibido con por los hombres con mucha alegría y poco después el se reencontró con sus hermanos y juntos regresaron a la aldea donde habían nacido a ir donde su madre pero esta ya había muerto, solo encontraron una montaña, dando a entender que su madre al morir se fusionó con la naturaleza y se convirtió en una gran montaña.

En el último nivel se encontró con una casa donde habitaba una sabia anciana quien le consejo tener mucho cuidado a la hora de encontrarse con su contraparte que habitaba ahí, aun así este ya estaba muy decido en ver y luchar contra su contraparte.

Transcurrida media hora, se despertó sintiendo un dolor agudo en el corazón que lo hacía mal, según la anciana mientras el dormía unos ocelotes le habían sacado su corazón humano para ser reemplazado por uno de coatí y que no se preocupara pues quedaba muy bien pues el y los coatís eran parecidos, nobles, curiosos y aventureros.

Hijo del dios Mua Mua y aunque su mito está más cercano a la figura de un semidiós, se sabe que este tuvo a viras personas que le rendía culto, teniendo el título como el dios de los hombres.

Petroglifo sobre el río Plátano, algunos autores sostienen que en la región había un gran centro religioso de los Pech.