Aunque su principal misión era la evangelización religiosa, también se dedicaron a restaurar antiguos edificios y otras estructuras.
Se estableció originalmente para nuevos colonos en la península, y no para indígenas.
[2] Jatñil le ayudaba a Caballero cultivando cosechas y construyendo otras misiones.
La misión se encontraba en una meseta con vista al Valle.
En la misión se cultivaban árboles frutales, olivos y viñedos.
En febrero de 1840, Jatñil, al oponerse a los bautizos forzosos a los que era sometida su tribu, inició una revuelta violeta en contra de la misión.