La tierra debe cargarse de nuevo en la cresta y compactarse para reflejar el contorno original aproximado de la montaña.
[1] Se emplean explosivos para eliminar hasta 120 m verticales de montaña, para exponer las vetas de carbón subyacentes.
[2][3][4] Es el método predominante de la minería del carbón en las montañas Apalaches en el este de los Estados Unidos, utilizándose principalmente en Kentucky, Virginia Occidental, Virginia y Tennessee.
Algunos estudios muestran que la minería de montaña tiene graves impactos ambientales, incluyendo la pérdida de la biodiversidad y la toxificación de las cuencas hidrográficas, que las prácticas de mitigación consiguen restablecer.
[5] También hay efectos adversos para la salud humana que resultan del contacto con las corrientes afectadas o exposición al aire con toxinas y polvo.