Fue adoptada por el Ejército Imperial Japonés en 1945, produciendo sus primeras bajas en el Frente del Pacífico, especialmente entre las unidades de tanques estadounidenses.
En ese mismo año, las tropas estadounidenses capturaron algunos manuales oficiales del arma.
Sus tres patas metálicas medían 15 cm cada una, para asegurar la distancia adecuada en donde la carga hueca produciría la máxima perforación.
[2] Para emplear la mina, el soldado retiraba el pasador de seguridad y después se lanzaba contra el tanque enemigo, como en una carga a la bayoneta, haciendo que la base de la mina impacte contra el objetivo.
[3] El arma fue empleada por el Ejército Imperial Japonés durante las últimas etapas de la Segunda Guerra Mundial en el Frente del Pacífico contra los tanques estadounidenses.