Miguel Rubio Feliz

La vena periodística nació cuando Teodosio construye una máquina fotográfica que más tarde vendió a la "Casa Losada".

Román, hijo mayor, pidió le construyeran una y así de esta manera todos los hermanos llegaron a tener una máquina en su poder.

Momento en que regresa al Diario Ilustrado , pero esta vez en jefe de la sección fotografía , durante 24 años.

En 1978 trabajó en la Revista Foto Sport hasta febrero de 1979, fecha en que se pone término a esa publicación.

Su única y gran desilusión en su vida profesional la constituyó el no haber estado presente durante los acontecimientos del año 1973.

Partí y efectivamente, en medio de una piedra el gato libraba la batalla a muerte con las aguas que crecían.

Pero a los pocos meses, la revista norteamericana Life reproducía en dos páginas mi reportaje gráfico.” A través de su amplia trayectoria, Rubio obtuvo numerosas distinciones profesionales, entre las cuales se incluyen: Gran Premio en el Salón de Fotografía Periodística en los años 1959 y 1972, Primer Gran Premio en el tema Deportivo (1975), Tercer Gran Premio – 1972- en el Salón Internacional para fotografías periodísticas mundiales, efectuado en Bulgaria.

Presentó sus fotografías en varias exposiciones, entre ellas una sobre la visita del presidente Eisenhower a Chile y otras sobre el terremoto de 1960, noticia más importante que le tocó reportear para el Diario Ilustrado.